¿Qué va primero en la fiesta de boda?
En primer lugar entra el sacerdote, ya que es la persona que conduce el acto nupcial. Después, entra el novio que irá acompañado de la madrina.
Le siguen la madre de la novia y el padre del novio y detrás las damas de honor, con los anillos de matrimonio.
Protocolo bodas civiles
Recuerda que es muy importante llegar puntual, ya que normalmente hay otras bodas antes y después, y el tiempo va muy ajustado.
Para las bodas civiles el protocolo admite que se ponga una música, previamente elegida por los novios para el momento en que ellos entren.
Para el resto del vestuario y demás, sigue el mismo protocolo que para una boda religiosa, aunque siempre con mucha más flexibilidad, por lo que no tienes que cumplir todas las reglas de manera tan exhaustiva.
Bien guardadas
Cuando no usemos las gafas o en el momento que nos las quitemos, lo mejor es guardarlas en su funda, bolsillo de la chaqueta, bolso.
Nunca las debemos usar a modo de diadema sobre nuestra cabeza, o colgadas del escote, tampoco es educado ponerlas encima de la mesa del restaurante.
Si nos las quitamos momentáneamente, para saludar a una persona, lo mejor es mantenerlas en la mano cerradas o guardadas, no juguemos con ellas, no chupemos las patillas y no las movamos en exceso con nuestros gestos.
12. ¿Qué pasa con los niños?
Si en la invitación de la boda no está clara la directriz, entonces lo ideal es no asumir y preguntarle a los novios. En caso de que se acepten niños en la boda, ellos deberán estar en una zona aparte y, de preferencia, acompañados por una niñera con el fin de que los adultos puedan disfrutar de su día.
1. Jamás puedes ir de blanco
Esta es la regla número uno y es la más importante. Y es que este color está reservado únicamente para la novia. Lo más elemental es que entiendas que el objetivo es hacer armonía con el estilismo de la novia y no un contraste.
Sobre todo si es una boda de etiqueta. Olvídate de lucir mucha piel y dejar poco a la imaginación. Ir discreta y con elegancia son las claves para triunfar en una boda.