Kit de galletas y mermelada
Fuente: Living in London
No dejéis que se acabe la fiesta por un dolor de pies (o varios en este caso). Regalad alpargatas tanto para ellas como para ellos (en ocasiones los zapatos de hombre pueden ser aún más incómodos que unos tacones de vértigo) y bailad hasta que el resto del cuerpo aguante.
Fuente: Blog de Las Quintas / Chic-in dec
5. Recordar estos consejos de Bodas.net
Si dudáis sobre invitar a una u otra persona, pensad en ciertas cosas. Si creéis que su amistad perdurará sin importar el tiempo ni el espacio, ¡no lo dudéis ni un segundo! Pero si creéis que solo es una relación temporal y que no tendrá una gran influencia en vuestras vidas, mejor no lo invitéis a la boda y aprovechad el espacio para quien sí sea un referente máximo para vosotros.
Hay unas reglas a la hora de escribir la invitación, que se pueden seguir o no, y que hacen referencia al nombre que se escribe en el sobre. En primer lugar, si vuestra invitación va dirigida a un familiar con su propia familia, la invitación suele incluir el nombre de dicha persona acompañada de las palabras “y familia”. Si vuestro invitado no es de vuestra familia y tiene pareja confirmada, lo más lógico es incluir el nombre de ambos en el sobre de la invitación.
En el caso de que la presencia del acompañante no sea obvia y quede en duda, ya sea porque no se le conozca pareja o porque esta todavía no goce de oficialidad, la invitación incluiría el nombre de la persona invitada con la opción de sumar el acompañante con el famoso +1. Si es así, deberá comunicároslo para que tengáis en cuenta a esa persona en la organización de la lista. A veces es duro, pues os sentiréis obligados a invitar a alguien desconocido en detrimento de otros amigos menores a los que tenéis que renunciar para no pasaros del máximo que hayáis establecido. Por suerte, algunos +1 saben perfectamente a qué eventos deberían o no acudir; aunque, si ese +1 no cuadra en vuestro gran día, quizá tampoco lo haga vuestro invitado.