3. Cola de catedral

Suelen medir unos dos metros –aunque algunas superan los dos metros y medio– y es, sin duda, la opción favorita de las novias más tradicionales y de muchas famosas que desean llamar poderosamente la atención en su "sí, quiero". Se trata de un tipo de cola muy llamativa que nace en la cintura y que suele acompañar looks majestuosos y muy elegantes, como vestidos de novia de corte princesa o románticos vestidos de novia en A.
Además, será perfecta para quienes se imaginan caminando hasta el altar con pajes, damitas o damas de honor, ya que su longitud requiere un poco de ayuda extra a la hora de moverse y sentarse en el lugar de la ceremonia.
Por otro lado, no olvides que los moños altos suelen combinar muy bien con este estilo, ya que ayudan a remarcar su elegancia. Aunque los recogidos de novia bajos de estética clásica y los peinados de novia con velo también son excelentes opciones.
Cola de capilla

Podríamos decir que es una de las más elegidas, ya que es cómoda, fácil de llevar y sencilla de sujetar a la muñeca durante el baile. Su principal característica es el metro y medio de largo que tiene, así que estaría a medio camino entre las colas más sencillas y las más largas e imponentes. ¿Buscas una opción confortable pero vistosa al mismo tiempo? ¡Escógela! Eso sí: recuerda que necesitarás algo de ayuda para que quede completamente extendida tanto durante tu entrada a la ceremonia como durante la sesión de fotos posterior al "sí, quiero".
Para tener en cuenta

- Si eres una novia de estatura baja, mientras más larga sea la cola menos te favorecerá, porque la atención estará fijada en ella y te verás bastante reducida.
- Considera el tamaño de los lugares en donde estarán antes de decidirte por una cola tipo catedral, porque no será nada fácil desplazarte por una iglesia o local que no tenga el tamaño adecuado o en donde no se hayan considerado los espacios.
Finalmente, tú eres la protagonista del día y dependerá solo de ti elegir si llevarás o no cola en el vestido de novia, pero no dejes de poner atención en lo que mencionamos antes; así también como a tu estilo, la temporada de la boda y el lugar. Para que todo alcance el equilibrio ideal y te puedas sentir más tranquila ocupándote de otros aspectos como la decoración para matrimonio y los vestidos de fiestas de tus damas de honor, por ejemplo.
