Anillos de bodas de oro
Ya sea que le guste el oro amarillo clásico, el oro blanco contemporáneo o el oro rosado romántico, los anillos de boda de oro son una opción popular y nunca pasan de moda. Seleccione el color que más le guste, o combine dos tipos diferentes de dorado para crear su propio estilo.
3. Escoger unas alianzas iguales
Al igual que en el punto anterior, la pareja de alianzas de boda tampoco tienen por qué ser iguales. La elección de cada una de ellas dependerá básicamente de vuestros gustos y del deseo de que se trate de piezas más o menos personalizadas.
Así, pueden ser idénticas, del mismo material pero con diferente diseño, iguales pero de materiales distintos, una lisa y otra con diamantes. También encontraréis alianzas de oro –que pueden ser alianzas de oro blanco, alianzas de oro rosa o alianzas de oro amarillo–, alianzas de acero, alianzas de plata. La lista de opciones a vuestro alcance es de lo más variada.
Platino
Es el más puro y precioso de los metales nobles. Tiene mucha más dureza que el oro y la plata y, por lo tanto, es el más duradero. También es más pesado, por lo que una alianza de platino tiene mucha presencia. Y es el más caro, ya que se trata de un material escaso y difícil de conseguir. Asimismo, no requiere ningún mantenimiento, por lo que bastará con limpiar los anillos con agua y jabón.
Su dureza lo hace ideal para engastar piedras preciosas. Así que si queréis una alianza con diamantes, un anillo de platino os garantizará que nunca se pierdan. Y es perfecto, por ejemplo, para acompañar a un vestido de novia de corte sirena de estilo contemporáneo.
El platino fue descubierto por los conquistadores españoles en la cordillera de los Andes quienes, en un principio, creían que no tenía ningún valor. Pensaban que se trataba de una aleación de oro y plata, afirmación que aunque no es cierta, sí fue determinante a la hora de atribuir a este metal el simbolismo de la unión entre lo masculino y lo femenino.