La música como protagonista
Uno de los elementos que caracterizó a Los Serrano fue que la música era parte fundamental de la serie y de las historias. Fran Perea cantaba la sintonía inicial Uno más uno son 7, incluyendo tramas de su personaje, Marcos, como cantante. Tras la marcha del actor malagueño de Los Serrano, los productores incluyeron una historia en la que los más pequeños formaban un grupo, así nació Santa Justa Klan.
"Nos sentaron en la oficina y nos dijeron que si nos apetecía montar una banda. Como mi padre era músico (Liberto Villagrasa Muñoz) y yo tocaba un poquillo el piano me encantó la idea", afirma Elías. "Natalia Sánchez había tocado el piano de pequeña; Andrés de la Cruz se encargaba de la guitarra, luego cogieron a Adrián Rodríguez porque era el que mejor cantaba de los cuatro", añade.
"No éramos muy conscientes de lo que estábamos viviendo, de la suerte que tuvimos, porque los que vivimos ahora de la música sabemos lo complicado que es llegar a los sitios. Con los años me he dado cuenta de lo afortunado que he sido", admite el músico.
Víctor Elías tocando el piano.
P.- ¿Cómo fue gestionar el éxito de la serie y del grupo?
R.- Hablo mucho con Natalia y Andrés, la música me ha unido a Fran, con el que llevo trabajando los últimos cinco años. También viví con Adrián un tiempo compartiendo piso… formamos una familia y, aunque a lo mejor estés dos años sin hablar, cuando te ves, es como si no hubiera pasado el tiempo.
Capítulo 25 de Los Serrano.
No podía seguir el ritmo de su personaje
Guille Serrano era el estudiante más rebelde del colegio de Santa Justa, en cambio, Víctor Elías no lo era tanto: "Yo era mucho más tranquilo porque era complicado ser igual de gamberro que él", afirma el músico.
Su madre era la actriz Amelia Álvarez del Valle, que le inculcó el amor por la actuación por lo que con 6 años, Víctor ya había tenido sus incursiones en el mundo del teatro y ya conocía como era por dentro.
"Para mi madre era más fácil llevarme de gira que dejarme con una cuidadora. Y yo, encantado porque para mí era un juego maravilloso en esa época. Hice varios papeles hasta que llegó el casting de Los Serrano", recuerda.
"Era una serie de la que no esperábamos que iba a tener el éxito que tuvo porque, como había trabajado en más proyectos que se habían acabado rápido, no suponía que fuera a durar 5 años y que, 20 después, siguiéramos hablando de ella", añade.
Pregunta.- ¿Qué recuerda de aquella época?
Respuesta.- Me quedo con la gente que conocí y de la que pude aprender mucho. Es que fue como una especie de carrera universitaria, cinco años aprendiendo, yendo cuatro o cinco días en semana a grabar para tener un máster con los mejores actores de este país del momento, y que lo siguen siendo en la actualidad.
Aprendí cómo funcionaba el medio, no solo la parte interpretativa, sino también la técnica. Y luego, por supuesto, que al final pasaba tantas horas allí que toda esa gente se convirtió en mi familia. Amistades que han pasado 20 años y ahí siguen.
P.- ¿Cómo lo compaginaba con los estudios?
R.- Teníamos una tutora en la serie que nos ayudaba con los deberes, aunque la llevábamos por el camino de la amargura (risas). Los colegios también tuvieron mucha paciencia, en ocasiones nos cambiaban las fechas de los exámenes por los rodajes… En la serie, los estudios eran lo primero.
Suenan campanas de boda
Además de sus proyectos profesionales, Adrián y Susy tienen planes personales. Hablamos de la boda que anunciaron hace unas semanas, pero a la que todavía no le han puesto fecha exacta. La razón es que la van “adelantando cada vez más”.
Ya están barajando varias opciones y han acudido a diferentes lugares. Aunque no saben la fecha exacta, si coinciden en que quieren que sea un día inolvidable: “En principio la fecha es en septiembre del 2023 pero cada vez lo vamos adelantando más y más así que no sabemos si quizás nos casaremos en primavera”.
Asesinato de dueños de Dolls Drinks sería causa de extorsiones por el éxito de su negocio
De acuerdo con lo expuesto por el reportero Carlos Jiménez, la madre de Odely señaló que la pareja fue víctima de extorsión por delincuentes, debido al éxito que tenía su negocio de licuachelas.
No obstante, los dueños de Dolls Drinks se habrían negado a pagar el dinero solicitado y, supuestamente, fue la causa de su asesinato.
Por la muerte de las dos personas se desplegó un operativo judicial para tratar de localizar a los sicarios, quienes huyeron en su motocicleta con rumbo al Estado de México.
Cabe destacar que el negocio Dolls Drinks cobró popularidad en los últimos años, debido a sus combinaciones de cerveza y diferentes tipos de alcohol, así como la presentación de estos.
El negocio, ubicado en Jesús Carranza No. 35 Colonia Morelos, en el barrio de Tepito, inclusive tuvo visitas de influencers y personajes de medios de comunicación.
Es importante señalar que Odely, una de las dueñas de Dolls Drinks, es presuntamente la sobrina de Francisco Javier Hernández Gómez, mejor conocido como “Pancho Cayagua”.
El hombre fue el fundador del grupo delictivo, la Unión Tepito, y fue asesinado a balazos a los 44 años en el estacionamiento de un centro comercial en la alcaldía Gustavo A. Madero.
Hasta el momento, ni la dueña de Dolls Drinks ni el negocio se habían visto involucrados en investigaciones ilícitas, y su única polémica se dio cuando se negaron a cerrar sus puertas aún en pandemia.