‘Era mi ídolo’
—¿Qué tal se llevan tu hijo y Julio?
—¡De maravilla! Al principio fue un poquito difícil de aceptar para mi hijo, ya tiene seis años y yo nunca le había presentado a alguien, él estaba acostumbrado a ser el único hombre en mi vida, y creo que es bastante normal que le costara un poquito. Pero Julio lo entendió perfectamente y, con todo el amor y la paciencia del mundo, se ganó su corazoncito, que no tardó en abrirse para él y para Luna, que es la otra niña de casa. Una anécdota muy graciosa es que un día le dije a Leo que era el amor de mi vida y él solito me corrigió, diciéndome que también lo es Julio.
—¿Cómo fue el momento en que conociste a Isabel Preysler?
—Isabel es una persona magnética. La vi por primera vez en su casa en Madrid y quedé como hipnotizada. Me impresionó su personalidad y su belleza. Recuerdo que me sonrió y nos abrazamos y me hizo sentir inmediatamente bienvenida.
—¿Recuerdas algo especial que te dijera Julio Iglesias, el día que le conociste?
—Conocí a Julio Iglesias el día de su cumpleaños. Me moría de ganas de conocerle, porque crecí con sus canciones y era mi ídolo de toda la vida. Fue superemocionante estar ahí celebrando su cumpleaños con su familia. Es una persona maravillosa, con un carisma y una simpatía sin igual.
“Comer sano es algo que se ha hecho siempre en casa de mi madre. El resto es cosecha propia” dice Julio de su buena forma física, recién cumplidos 51 años
REALIZACIÓN: ALFIN PRODUCCIONES
El accidente que cambió su vida
Una de las cosas que, sin duda, ha marcado la vida de Julio Iglesias fue el accidente de coche que el 22 de septiembre de 1962, justo la víspera de su cumpleaños, tuvo junto a varios de sus amigos cuando recorrían el trayecto entre Majadahonda y Madrid. Un desafortunado choque le llevó al hospital y acabó con su carrera como futbolista profesional del Real Madrid dejándole atado a una silla de ruedas durante más de un año.
Pero contra todo pronóstico, Julio se recuperó. A base de muchísima terapia de rehabilitación el cantante consiguió volver a caminar al mismo tiempo que daba sus primeros pasos en la música gracias a la guitarra que Eladio Madalero, uno de los enfermeros del hospital Eloy Gonzalo, le regaló para que este matase un poco el tiempo.
En medio de la oscuridad de haber perdido el que hasta entonces era su propósito de vida, encerrado entre las paredes de un hospital y las de la casa de veraneo que su familia tenía en Peñíscola, Julio Iglesias descubrió que más allá del fútbol, podía volver a amar. Primero los poemas y después la guitarra se abrieron paso en su mente y en su corazón haciéndole ver que tenía una alternativa que iba más allá del deporte: la música.
Fuerte unión
Julio Iglesias Jr. asegura que Tamara Falcó se encuentra "muy bien"
Enrique, por su parte, le dijo a Tamara que tenía un novio ruso para ella. Está claro que Falcó tiene el soporte de sus hermanos, tanto por parte de su madre, como por parte de su padre. Xandra Falcó, su hermana mayor por parte de padre, comentó que la Marquesa de Griñón necesita ahora un poco de tranquilidad. Por eso que ahora se ha refugiado en el palacio El Rincón, la finca que heredó de su padre, Carlos Falcó, un lugar de lo más especial y familiar para ella.