Frutas, un clásico infalible
Las frutas, sobre todo cítricas, como las naranjas, los limones, las mandarinas y las limas, u otras de temporada, como las fresas o las nectarinas, son un recurso excelente para vestir los centros de mesa de primavera para bodas. Y es que hablamos de creaciones que resultan vistosas y desprenden una agradable fragancia.
¿Os gusta la idea? ¿Os habéis enamorado de algún centro de mesas sencillos con frutas y queréis lo mismo para vuestro evento? Pues bien, solo debéis repartir algunas frutas sueltas por la mesa –sobre todo si estas son imperiales– o bien agruparlas en una fuente. Aunque la combinación de las frutas con arreglos florales primaverales o follaje verde diverso tampoco defraudará.
Elementos vintage
Los arreglos de mesa para bodas confeccionados con jaulas o regaderas metálicas llenan de frescura los ambientes románticos y se han vuelto grandes must de las temáticas vintage. Se pueden colocar en las mesas o colgar en las ramas de árboles como una especie de farolillos que, acompañados de velas o bombillas, aportan calidez y delicados tonos luminosos.
Sin hacer ruido, pero sí imprimiendo mucho encanto, las bases simples se adentran en el top de centros de mesa para boda sencillos, que destacan por su minimalismo y simpleza. Pueden emplearse desde tradicionales floreros de cristal hasta macetas de cerámica, metal o barro, así como cajas de madera o huacales, dependiendo del estilo de la boda.
Las bases al natural se llevan bien con los ambientes rústicos. Si desean darles un toque romántico y boho chic, pueden pintarse en blanco o verde mint y decorarse con encaje. Ni un solo invitado se resistirá a llevarse estos fantásticos recuerdos de mesa que llenarán de encanto cualquier rincón.
Cajas de madera. Reciclaje y ahorro
Otra idea para los amantes del estilo rústico. Los objetos de metal envejecido quedarán perfectos como centros de mesa, sobre todo si se combinan con velas y se llenan de flores. De nuevo, las variedades silvestres se llevan la mención especial, como la paniculata o el tomillo. Recordad que si les añadís flores grandes de colores suaves vuestro centro rústico quedará ideal.
Otra posibilidad es utilizar como centro de mesa objetos de metal con dibujos y colores naturales o nude, así como jarrones, regaderas, cestas. Esta opción resultará muy acertada en una boda de aire vintage por su apariencia envejecida. En esta ocasión encajarán flores de un mismo color, en contraposición con los colores que conformen el dibujo del objeto.
Por otro lado encontramos las jaulas, que siempre serán un acierto si queréis dar un toque de fantasía a vuestros centros de mesa. Jaulas de metal con formas originales, blancos o colores nude, acabados cuidados y dibujos de mariposas, pájaros o corazones. En su interior incluid flores grandes de colores, silvestres y hiedra. Muy romántico, el resultado quedará genial en enlaces de estilo rústico y esencia vintage.