Noor de Jordania, la reina olvidada que quedó a la sombra de Rania de Jordania
Noor de Jordania cumple 65 años y lo hace, en cierta medida, olvidada. La que fuera 'la luz' del rey Hussein, continúa con su vida participando en organizaciones internacionales.
Noor de Jordania ha llegado a los 65 años. Elizabeth Halaby, que así se llama en realidad, nació en Washington el 23 de agosto de 1951 y se crió junto a sus dos hermanos. Estudió Arquitectura en la Universidad de Princeton, donde se licenció. Entonces no podría imaginar que terminaría siendo Reina de Jordania y convirtiéndose en todo un mito. Su relación con el rey Husein surgió por casualidad. Ella se encontraba trabajando con su padre en el aeropuerto internacional de Ammán, Jordania, cuando le conoció de forma totalmente inesperada. La belleza de Noor no pasó inadvertida para el Monarca, que se quedó completamente encandilado con ella.
Se casaron el 15 de junio de 1978, ella tenía 26 años, y él 42. Para el Rey hachemí era su cuarto matrimonio, y la celebración del enlace fue totalmente distinta a los anteriores. Todo fue muy sobrio y sencillo, fuera incluso de un programa nupcial propio de unos reyes. Fueron los medios extranjeros los que hicieron que la boda se proclamara por el mundo.
Noor de Jordania en los Premios Marianne & Sigvard Bernadotte
Vida tras el matrimonio
Tras contraer matrimonio, Lisa se convirtió al Islam y su recién estrenado marido le cambió el nombre. La norteamericana pasó a llamarse Noor al-Hussein, cuyo significado en árabe es Luz de Hussein. Para el Rey, supuso una verdadera luz en su vida, ya que Noor, le ayudó a superar la muerte de su anterior esposa, Alisa; quien falleció en un accidente de helicóptero dejando a Husein sumido en una profunda depresión. Fue Noor la que le devolvió la ilusión y la alegría.
Noor fue reina consorte de Jordania desde el momento en el que contrajo matrimonio con Hussein y hasta que este falleció. El matrimonio tuvo cuatro hijos en común: El príncipe Hamzah, primogénito y, por ello, heredero de la Corona desde 1999 a 2004; el príncipe Hashim, la princesa Iman y la princesa Raiyah.
Noor de Jordania en el Capitolio de Washington
Hussein y Alia
El matrimonio de Hussein y Muna duró hasta 1972, cuando se divorciaron, y ese mismo año el rey se casó con la egipcia Alia Baha‘ud-Din Toukan. Con ella tuvo dos hijos biológicos, Haya y Ali, y adoptaron a una niña palestina, Abir, cuya madre había muerto en un accidente de avión cerca del aeropuerto de Ammán. Cosas de la vida, la propia Alia moriría en un accidente de helicóptero en 1977 a los 28 años. De los hijos de Hussein y Alia, la más conocida es Haya, quien hace unos años copó los titulares de medio mundo.
Sexta esposa del emir de Dubái, Haya decidió en mayo de 2019 huir junto a sus dos hijos, Jalila y Zayed, y pidió asilo en Alemania y luego en Reino Unido, donde se desarrolló uno de los juicios más caros de la historia, del que salió victoriosa, consiguiendo la custodia completa de sus vástagos.
Por su parte, su hermano Ali es una de las manos derechas del rey Abdalá y ejerce como presidente de la Federación de Fútbol de Jordania. Está casado con Rym Brahimi y tiene dos hijos, Jalila y Abdalá.
De Abir, la hija adoptada por Hussein y Alia, solo se sabe que se crió en Reino Unido y estudió en Estados Unidos.
Un duro golpe
La Reina Noor ha vivido toda la vida volcada en su familia, a quien ha apoyado en todo momento. Por esto, la muerte de su marido, el rey Hussein, supuso una gran pérdida para ella. Su Majestad falleció el 7 de febrero de 1999 tras luchar durante 6 meses y medió contra un cáncer que se lo llevó a los 63 años.
A finales de 1998, cuando la salud del Rey Hussein empeoraba por momentos, se comenzó a tratar el tema de la sucesión, en la cual no saldría muy bien parada la Reina Noor. En aquella época se hablaba de la mala relación que manteníaNoor con la esposa de Albalá, el Príncipe Heredero. La Reina presionó a Hussein para que cambiara los planes de la sucesión y le dejara el trono a su otro hijo, Hamzá, el primogénito.
Finalmente, cuando Hussein estaba a punto de morir, cambió la situación y decidió que Abdalá fuera el príncipe heredero, pero que cuando ocupara el trono, nombrara como heredero a Hamzá. Este candidato era el que Noor prefería. Nada de lo que había dispuesto el Rey permaneció vigente más de algunas semanas.
Tras convertirse Abdalá en Rey, Rania de Jordania tomó el titulo de princesa real; mientras que Noor mantuvo el título de reina. Esta situación no duró nada, ya que Abdalá nombró reina a su esposa Rania, en perjuicio absoluto de la bella Noor. La luz de Noor de Jordania se vería eclipsada por una joven y moderna Rania, que supondría una gran novedad para el país y que eclipsó para siempre a su suegrastra.
Hamzah de Jordania junto a Noor de Jordania, Abdalá y Rania de Jordania en su primera boda
Noor no permaneció en el país más tiempo del necesario. Al día siguiente de recibir esta noticia, decidió marcharse de allí. La viuda de Husein se fue a su tierra natal, a Estados Unidos, y dejó a un lado su vida como consorte.