Aprobados y suspensos de Osasuna: Torró y David García, unos titanes

Aitor Fdez: Sin excesivo trabajo, no pudo hacer mucho más en los dos goles del Athletic.
Peña: Le rompió la cintura Nico Williams en el segundo gol de Guruzeta. No podía con él.
Catena: Serio atrás, aunque con algunas dificultades en la primera parte.
David García: Remate en ataque antes del descanso y otra de cabeza que le paró Simón esquinado. Listo en la segunda amarilla y expulsión de Sancet. Muy potente atrás.
Mojica: Llegó tarde en el gol de Iñaki Williams después de demostrar sus dotes ofensivas en los primeros minutos. Erró un gol solo ante Simón lanzando alto.
Torró: Cortó un balón providencial a Nico Williams para evitar el 0-3. Cubre mucho campo. Un titán.
Moi Gómez: Sin participación destacable.
Moncayola: Mucho despliegue físico, pero sin profundidad en esta ocasión.
Oroz: No logró su habitual inspiración entre líneas.
Rubén García: Muy activo de salida. Simón le abortó un tiro sólo ante el arquero.
Budimir: Desaparecido en combate.
Chimy Ávila: por Rubén García en el 60. Muy activo desde su salida como extremo derecho. Después gozó de una ocasión que abortó Simón antes de su feísima entrada a Berenguer. Expulsado.
Arnaiz: Por Torró en el 60. Trató de agitar el avispero. Remató un par de veces ante Simón.
David García: “No sé qué hubiera sido de Osasuna si hubiéramos perdido en Sabadell, a lo mejor no estaríamos hoy aquí sentados”
Pamplona | 23·03·23 | 13:43 | Actualizado a las 14:01

David García, celebran la permanencia en Segunda de Osasuna en 2015 junto a Jose García. Mikel Saiz
A David García Zubiria (Ibero, 14/2/1994) le ha entrevistado Radio Marca este jueves en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas, donde se encuentra disfrutando de su primera concentración con la selección española absoluta, y el futbolista de Osasuna, además de reconocer que “ahora mismo soy el hombre más feliz del mundo”, también ha respondido a otras cuestiones, una de ellas relacionados con el partido que empataron los rojillos en Sabadell el 7 de junio de 2015, resultado que permitió al conjunto navarro eludir in extremis el descenso a Segunda División B.
