Comienza el juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa: así fue el brutal ataque de los ocho rugbiers
La madrugada del 18 de enero de 2020, Fernando Báez Sosa salió a bailar con sus amigos y su novia al boliche Le Brique, en Villa Gesell. Allí todo transcurría con normalidad, hasta que tuvo un encontronazo con un grupo de rugbiers. Parecía que la situación terminaba en ese lugar, pero la patota lo esperó afuera de la discoteca y lo asesinó a golpes.
Al día siguiente de haber llegado, Fernando y sus amigos decidieron que iban a ir a bailar esa noche. Hicieron una previa y después fueron a la clásica disco de Gesell, que explotaba de jóvenes.
En un momento de la noche, los patovicas sacaron a Fernando después de que intentara defender a su amigo Julián García, que tuvo un altercado un grupo de jóvenes. La situación comenzó cuando uno de los amigos del joven rozó a uno de los rugbiers sin querer. Sin vueltas, la seguridad del local bailable echó a los dos bandos.
Luego de ser expulsado de Le Brique, Báez Sosa se quedó enfrente del boliche junto a otros compañeros, a la espera de que saliera el resto del grupo. Pocos minutos después, dos rugbiers (Enzo Comelli y Ciro Pertossi) vieron a Fernando. Ambos les avisaron al resto de la banda y todos fueron directo para atacarlo por la espalda. Eran diez, pero, según la fiscalía que investiga el hecho, solo ocho participaron del homicidio.
La nueva vida de Julieta Rossi, la novia de Fernando Báez Sosa
Desde hace tiempo se sabe que Julieta es apasionada por el baile, más precisamente por el ritmo urbano, el cual disfruta por completo y lo toma como una forma de desconexión.
Pero además, ahora participa en sesiones de fotos. Durante los últimos días compartió en su cuenta de Instagram una producción que realizó en ropa interior y también sin ropa.
En una de las fotos posó en topless y de espalda, tapándose con un brazo para evitar cualquier tipo de censura. En otras, en tanto, se fotografió solo con corpiño de encaje en tono nude.