El gesto del rey Felipe VI a la reina Letizia que ha sorprendido: "El día de su boda fueron menos cariñosos"
Un gesto del rey Felipe VI hacia la reina Letizia ha generado numerosas reacciones de sorpresa. Las muestras de afecto entre los monarcas no son fáciles de ver en sus apariciones públicas, y una que se producía en su viaje oficial a Holanda está generando cierto revuelo.
En la visita de Estado a los Países Bajos de los reyes de España, la reina Letizia tenía que sentarse para recibir a los invitados, justo antes de una cena de gala en honor a ambos, debido a una dolencia en el pie izquierdo. Esta patología es el neuroma de Morton, provoca numerosos inconvenientes y en ocasiones resulta muy limitante.
Los incómodos y dolorosos momentos que pasaba Letizia, no impedían que la reina acudiera a ninguno de los muchos actos a los que han acudido en su visita oficial a los Países Bajos. Quizás las dificultades que sufría Doña Letizia acentuaban la sensibilidad de Don Felipe, y llevaban a que se produjera ese gesto.
Felipe VI estará estrechando lazos con una mujer
Amigos que hoy en día siguen siendo el salvoconducto del monarca, que según afirman varias fuentes, intenta pasar el mínimo tiempo en Zarzuela. Prefiere mantenerse alejado de Letizia, salvo que los compromisos institucionales le obliguen a coincidir con ella. Y aun así, se puede ver la actitud de indiferencia de Felipe hacia su mujer.
Ahora Felipe, al margen de su habitual grupo de amigos, ha abierto su círculo, recuperando vida social. Y en él hay una mujer que se ha convertido en una íntima del rey. La reina Sofía ha hablado de ella en una conversación en la que pensaba que nadie escuchaba. Una mujer que es una rica heredera con la que tiene una relación estrecha, bastante más que con el resto. Y de la que Sofía habla como “novia”. Desconocemos si lo hace porque realmente lo es o porque está deseando que lo sea.
Qué fue de… Isabel Sartorius, la 'niña bien' que se convirtió en el primer gran amor de Felipe VI
Durante alrededor de tres años, Felipe VI fue el príncipe azul de Isabel Sartorius. Parece ser que el monarca la conoció en la primavera de 1989, en una conferencia sobre Perú que un primo de ella dio en Madrid. Pero los rumores de un posible noviazgo no empezaron a circular hasta que en el verano de ese mismo año se publicaron en una revista unas imágenes donde Sartorius y Felipe aparecían juntos a bordo de una lancha en Palma de Mallorca. A partir de entonces, aquella guapa rubia de ojos verdes se convertiría en el objetivo de todos esos reporteros deseosos de indagar en la faceta más personal del entonces heredero de la corona de España.
Varias publicaciones contaron que Sartorius vivía en la exclusiva colonia de El Viso y que era hija del abogado Vicente Sartorius Cabeza de Vaca, marqués de Mariño, y la argentina Isabel Zorraquín. Su padre se separó de su madre cuando ella era pequeña y a los trece años, después de que su progenitora se casara con el político peruano Manuel Ulloa, que se convirtió en primer ministro de su país entre 1980 y 1982, se trasladó a vivir a Lima. Algo más tarde viajó a Washington para estudiar Ciencias Políticas en la Universidad de Georgetown, precisamente el mismo sitio donde Felipe de Borbón realizó un curso de posgrado sobre Relaciones Internacionales tras terminar sus estudios de Derecho.
Felipe VI y Letizia, vidas por separado
La supuesta infidelidad de Letizia ha sido un tema tabú en Zarzuela, conocido por toda la familia real pero mantenido en silencio. Felipe VI habría movido sus influencias para evitar un divorcio, lo que habría llevado a una separación de facto entre él y Letizia, quienes comenzaron a llevar vidas separadas.
Ya en su momento ambos empezaron a hacer vida por separado. Letizia buscó consuelo en sus amistades en Madrid, o realizando escapadas de incógnito. Mientras que Felipe retomó su vida social, recuperando antiguas amistades. Las que había dejado de lado por Letizia, que nunca mantuvo una buena relación con los amigos de su marido. Amigos del club náutico de Mallorca y de sus sesiones de esquí en Baqueira. Personas de su círculo de confianza en lo que siempre se ha refugiado.