Boda rito celta: una hermosa tradición llena de magia y simbolismo
La boda celta es un rito lleno de magia y simbolismo que ha sido transmitido a lo largo de los siglos. En este tipo de ceremonia, se busca establecer una conexión especial con la naturaleza y con los antepasados.
Uno de los momentos más destacados de esta boda es la «unión de manos». En este acto, los novios entrelazan sus manos derechas y recitan sus votos matrimoniales. Este gesto simboliza la unidad y el compromiso mutuo en su vida juntos.
Además, las parejas que optan por una boda celta suelen realizar un ritual del fuego. Este consiste en encender una hoguera sagrada como representación del amor ardiente y eterno que existe entre ellos. También puede haber una llama individual para cada uno de los novios, que representan su propia individualidad y autenticidad.
Otro símbolo importante en las bodas celtas es el nudo de infinito. Este diseño entrelazado sin fin representa la eternidad y la interconexión de todas las cosas. Los novios pueden intercambiar anillos con este diseño o incluso tenerlo tatuado en sus cuerpos como muestra de su unión indisoluble.
En cuanto al atuendo, las parejas suelen optar por vestuarios inspirados en los antiguos trajes celtas. Esto incluye colores terrosos, adornos de hojas y ramas, y elementos naturales como piedras y plumas.
Leer más Consejos para crear un discurso inolvidable para la novia en tu bodaEn resumen, una boda celta es una hermosa tradición llena de magia y simbolismo. Con rituales como la unión de manos, el fuego sagrado y el nudo de infinito, esta ceremonia busca establecer una conexión especial con la naturaleza y celebrar el amor eterno entre dos personas.
Decoración boda celta
No sabemos si los celtas tenían una ceremonia religiosa/espiritual para este rito de paso ni tampoco sabemos qué adornos utilizaban. Pero lo que está claro es que las flores son de gran importancia y pueden utilizarse para montar el altar, para esparcir una determinada flor, semilla o baya en el suelo, y para formar un círculo alrededor de la novia, el novio y los invitados. También se puede utilizar un triskel que puede decorar diversas partes de la boda, tanto en la ceremonia como en el banquete. Nuestro consejo es que utilices los símbolos que sientas más tuyos de diversas maneras dentro de la ceremonia. Por otro lado, si tienes una mascota y quieres que esté en tu boda no dudes en llevarla, pues todos los animales tienen un significado muy importante en la cultura celta. En general, una ceremonia celta debe ser bastante sobria, más vinculada a la naturaleza y a su belleza natural que a la obra del hombre.

Olga Pérez de Un Mundo de Eventos añade: "a la hora de elaborar la paleta de colores y de diseñar la decoración, hemos de tener muy en cuenta los colores y texturas naturales, como los verdes y las maderas, ya que el bosque es el gran protagonista en las bodas celtas . Precisamente por eso no se aconseja una decoración muy abundante, sino más bien sutil, solo con algunos detalles para que la naturaleza no quede en un segundo plano".

8. Plantar un árbol
Este ritual de boda servirá para aportar vuestro granito de arena a la naturaleza. Si una de las cosas que dicen que hay que hacer en la vida es plantar un árbol, ¿qué mejor que hacerlo junto a la persona que amáis? Es un acto simbólico y muy bonito. Plantar vida y ver cómo va creciendo es algo precioso para hacer juntos. Además, siempre podéis ir al lugar en el que lo habéis plantado y recordar vuestro día.
Si sois unos apasionados del arte y se os da bien pintar o mejor, sois artistas, entonces esta es la mejor opción para vosotros. Una buena manera de expresar vuestros sentimientos y emociones será a través de la pintura. Es muy sencillo. Solo tenéis que tener un lienzo en blanco, un caballete a poder ser para estar más cómodos, pintura y mucha imaginación. Además, será un recuerdo que podéis guardar para siempre en vuestra casa y al verlo siempre os trasladará al día de la boda.

El matrimonio para los celtas, ayer y hoy
El matrimonio en la época celta era un contrato que atestiguaba la unión libre de dos personas, que también podían decidir separarse en cualquier momento. El matrimonio garantizaba a las partes derechos y deberes para salvaguardar la familia. Por lo tanto, no había grandes ceremonias. Aun así, el matrimonio era un momento importante, especialmente los matrimonios de alto rango, porque permitían la reunión de los clanes y la forja de alianzas y amistades. Se organizaban enormes banquetes, en los que se consumía mucha comida, cerveza e hidromiel. Una tradición muy antigua es el cortejo mediante la resolución de acertijos. Hay que saber que a los celtas, en general, les gustaba hablar con metáforas, acertijos y juegos de palabras para expresar la complejidad del mundo y eran obstáculos que había que superar para conquistar a la mujer o al hombre deseado. El matrimonio para los celtas era una formalidad puramente contractual y no implicaba ninguna celebración religiosa, o al menos no ha sobrevivido ninguna. Los celtas, de hecho, no practicaban la pedida de mano y el suyo no era un matrimonio espiritual. En la práctica, no sabemos a partir de qué momento el matrimonio en el mundo celta adquirió también una connotación espiritual y/o religiosa.
Hoy llamamos matrimonio celta a aquel que incorpora una espiritualidad que se inspira en la tradición celta y utiliza símbolos antiguos. Como no se conocen ritos matrimoniales religiosos de la época celta, el matrimonio celta actual se compone de ritos reconstruidos que se refieren a los ritos celtas conocidos que tenían lugar, por ejemplo, durante los festivales, o a los ritos que se encuentran en diversos libros sobre la cultura celta escritos durante la Edad Media.
Para los celtas, lo sagrado y lo profano se mezclaban, no eran dos esferas de la vida separadas como hoy, sino que una impregnaba a la otra. Lo sagrado estaba vinculado a la naturaleza y a la relación del hombre con ella. Por ello, el matrimonio celta actual también está vinculado al lugar natural, al nemeton, al claro sagrado.
- La ceremonia de la rosa
El primero de los rituales para bodas civiles es la ceremonia de la rosa. Este ritual consiste en intercambiar dos rosas, generalmente rojas, como símbolo de amor. Son el primer regalo como casados que reciben el uno del otro.
No voy a escribir el texto utilizado en esta ceremonia porque puede variar mucho de un maestro de ceremonias a otro.
Lo bonito sería utilizar la rosa siempre que necesitemos decir algo a nuestra pareja: pedir disculpas, demostrar el amor que sientes por ella y en definitiva que esa primera rosa no sea la última que entra en vuestras vidas.
Cada uno personaliza el texto a su gusto, incluye cosas, olvida otras.
«Es muy utilizado un párrafo del famoso libro “El Principito” en el que se habla del valor de la rosa y remarca lo diferentes que son todas las rosas al igual que nosotros también lo somos»


