14 reglas básicas y generales para lucir sombreros
1 Como regla básica el sombrero que se luzca será de menor tamaño conforme aumenta la hora del día.
Así, los de alas más anchas serán más adecuados para eventos en la mañana, y los de alas más cortas ideales para la media tarde, mientras haya sol.
2 Los sombreros se llevan solamente en eventos que se celebran durante el día, o media tarde, sin gafas de sol y siempre que no llueva.
Nunca debe llevarse luego de la caída del sol.
3 El ala jamás debe sobresalir el ancho de los hombros, y debe hacer sombra justo hasta la altura de los ojos.
4 El sombrero debe ir bien calzado en la cabeza, si queda muy alto es chico.
Es muy importante que la base del sombrero se ajuste perfectamente en la cabeza.
Debe llevarse muy bien sujeto, de manera de poder caminar con total naturalidad, y desenvolverse como si no se llevara nada puesto.
5 Para lucir elegantemente este tipo de accesorio, no se puede sentir vergüenza por llevar algo sobre la cabeza.
Si no se está acostumbrada a lucir sombreros, es mejor evitar ponerse uno el día de la boda, ya que la idea es estar muy cómoda y relajada.
6 El sombrero debe siempre combinar en armonía con el resto del atuendo a vestir, complementando perfectamente el look.
7 Según el protocolo el sombrero debe llevarse durante todo el evento, y no debe quitarse en ningún caso, sea en recintos cerrados, en templos religiosos y donde tenga lugar el banquete.
Lo más adecuado es tener este detalle en cuenta a la hora de elegir el sombrero a lucir.
8 En el caso de sombreros muy grandes, el saludo más apropiado según el protocolo, será extendiendo la mano, dada la dificultad que se presenta para saludar con uno o más besos.
Canotier
Por su sencillez es ideal para bodas de campo o de playa. Luce perfecto con un moño bajo, o con pelo suelto en melenas más cortas.
Se trata del sombrero que usaban los gondoleros de Venecia desde 1880, y lo solían adornar con una cinta larga para diferenciarse de los oficiales de marina.
Coco Chanel lo eligió luego como símbolo de la nueva era, imponiendo el sombrero como uno de los símbolos de la mujer.
Bombín
Es un sombrero en forma de hongo, de ala muy corta, ideal para bodas en la ciudad, o campestres muy distinguidas. Lo más apropiado es lucirlo con un moño bajo.
Este sombrero cuenta con una hendidura en el centro de la copa, y su ala es corta.
Luce espectacularmente bien en elegantes bodas campestres de invierno.