La Audiencia Nacional absuelve a Teddy Bautista y otros 9 acusados del caso Saga
La Audiencia Nacional ha absuelto al expresidente de la Sociedad General de Autores Españoles (SGAE) Eduardo Teddy Bautista y a otros nueve acusados por presuntos delitos de apropiación indebida y administración desleal, entre otros, en relación con el desvío de fondos de la entidad en el llamado caso Saga. La Fiscalía pedía penas que oscilaban entre 12 años y medio y dos años de prisión.
Un músico ambicioso
Pero la vida pública de Edudardo Bautista García (Las Palmas, 1943), hijo de diplomático y pianista, no comienza con sus inquietudes de gestor si no con las de músico. Ahí se encuentra ya el embrión de un hombre inconformista, de difícil temperamento y ambicioso. Nos remontamos a finales de la década de los 60, al año 1968, clave para la definitiva incorporación a la modernidad del pop y el rock patrios. Si en 1966, Los Bravos consiguieron situar «Black is black» en los primeros puestos de las listas de éxitos británica y estadounidense, dos años después los Canarios —en su origen una banda llamada Ídolos, surgida alrededor de Teddy Bautista— publicaban el primer volumen de «Lo mejor del Clan!».
La astracanada, debida al productor Alain Milhaud, diluyó el protagonismo de Canarios en el de Pop Tops, cuyas canciones ocupaban la cara B del disco. No obstante, el temario incluía títulos como «Get on your knees» («Ponte de rodillas»), que se convirtió en la canción del verano de aquel año —y que estos días ha recuperado actualidad en las redes sociales—, cuyo formato albergaba idénticos hallazgos a los localizados, en EE.UU., por el productor James Williams Guercio para Blood Sweet & Tears y Chicago; un explosivo preparado de rock, jazz y soul, con una abigarrada sección de metales como hecho diferencial.
Los éxitos del álbum «Free yourself» marcaron en lo sucesivo la carrera de Canarios, trasladando el epicentro de su música a todos los escenarios imaginables. De estos, precisamente, salió un nuevo disco titulado «Canarios vivos». Posteriormente, tras algunos devaneos en solitario —documentados todos en el single «En los bosques de mi mente»—, Teddy abandonó las convenciones negras del soul y decidió reconstruir los Canarios en 1974. El objetivo, grabar una adaptación al rock de la obra de Antonio Vivaldi «Las cuatro estaciones», a la que tituló «Ciclos». Culpables de tan ambiciosa iniciativa habrían sido el trío Emerson, Lake & Palmer, que un año antes habían hecho lo propio con «Cuadros para una exposición», de Mussorgski, y, sobre todo, Frank Zappa, amigo y consejero del músico.
El "Broadway madrileño"
El expresidente se enfrenta en solitario, en el caso Arteria, a otros cuatro años de prisión por administración desleal. En este juicio, el fiscal entiende que hubo un fraude de casi 30 millones de euros fruto de la ruinosa compra de los teatros Lope de Vega y Coliseum de Madrid. Anticorrupción señala que se pagó un sobreprecio de 29,8 millones. Y culpa a Bautista: “Fue una decisión de su exclusiva voluntad, gestada y acordada a espaldas de los órganos correspondientes, con déficit absoluto de estudios solventes y objetivos, y, en fin, contraria a los intereses de la entidad que representaba y dirigía, más allá del carácter ‘visionario’ de la misma que el propio acusado reconoció que concurría en ella”.
Para asegurarse el voto favorable a la operación en la entidad dijo que se trataba de una “operación cósmica” encaminada a crear el “Broadway madrileño”. Y además, según la fiscalía, transmitió datos falsos para convencer de la operación a la junta directiva. De hecho, los vendedores de los teatros dijeron tras recibir la oferta de Bautista que les había tocado “la lotería”.
Teddy Bautista
Niñez y adolescencia
Nace el 27 de mayo de 1943 en Las Palmas de Gran Canaria, cuyo verdadero nombre es Eduardo Bautista García. Siempre sintió especial atracción por los sonidos que llegaban desde Norteamérica. De adolescente se integró en un grupo llamado Teddy Ray and the Devil’s Rock, con el cual intentó emular las hazañas de los rockers estadounidenses.
Su información fue de primera mano. Esa situación privilegiada le permitió beber directamente de las fuentes originales. Enseguida el nombre del grupo se transformó en el de Los Ídolos, que consideraban más apropiado para un conjunto ye-yé. Grabaron tres elepés. Su padre ejerció de manager y les buscó actuaciones en la península y una gira por Estados Unidos. Pensaron que allí el nombre de Ídolos no decía nada, así que lo cambiaron por el de The Canaries, más atractivo.
Teddy Músico
Editaron un elepé, Flying High, con doce canciones, diez de las cuales eran de Teddy Bautista, que entonces utilizó su segundo apellido, García, para firmarlas. Lo grabaron como cuarteto y fue un álbum típicamente beat, cantado en inglés, que tardó más de una década en editarse en España. Al regresar a España adaptaron el nombre del grupo como Los Canarios. Aumentaron el número de componentes y derivaron su estética hacía el soul. Teddy siguió componiendo canciones y cantándolas en inglés. Así fueron surgiendo temas como "Pippermint Frappe", (incluida como tema principal en la película homónima de Carlos Saura), "Three two One Ah. Y sobre todo "Get on your Knees", canción publicada en 1968 y una de las más conocidas de la música moderna española.
En 1971 Teddy Bautista publicó un single como solista: In the backwoods of my mind / Good news blues (extra-extra part II), muy convencional en las formas pero destacable por el diseño de la funda desplegable, realizado por Carlos Juan Casado. La música fue muy corriente y los temas arreglados por Zack Laurence se alejaron muchísimo de lo realizado antes con su grupo matriz. Los Canarios se mantuvieron activos hasta 1972. Ese año Teddy tuvo que ir a hacer la mili. Le sustituyó Pedro Ruy Blas. Al volver hubo un serio problema sobre los derechos de utilización del nombre del grupo. Teddy hizo valer los suyos y formó unos nuevos Canarios. El resto de los músicos disidentes se integraron en Alcatraz.
De ídolo a canario y viceversa
Nacido en 1943 en una familia acomodada de Las Palmas, con un abuelo masón que llegó a colocar un escudo con el compás y el cartabón en el balcón de la casa familiar en pleno franquismo y una madre concertista de piano, Teddy Bautista tuvo una formación musical clásica hasta que, en la adolescencia, descubrió el rock and roll.
En 1962 fundó Los Ídolos, grupo con el que actuó en el club Flamingo de la ciudad hasta que un promotor norteamericano les propuso hacer una gira por parques de atracciones de Estados Unidos, país en el que serían rebautizados como The Canaries. A su regreso a España, ya como Los Canarios y tras cumplir con el servicio militar, no sin antes evitar por los pelos un proceso militar por deserción, Bautista desarrolló una de las carreras musicales más interesantes, vanguardistas y originales de la época. Rompió las listas de éxitos con Get on your knees, participó en Peppermint Frappé de Carlos Saura, grabó discos míticos como Ciclos, montó Jesucristo Superstar con Camilo Sesto, experimentó con la electrónica y la informática, produjo a Leño, a Nacha Pop, a Luis Eduardo Aute, participó en decenas de grabaciones sin ser acreditado para poder aprender así el oficio de ingeniero de sonido y, antes de cumplir los cuarenta, se incorporó a la Sociedad General de Autores.
"Teddy Bautista entró en la SGAE por consejo de Augusto Algueró padre, que le explicó que la mejor forma de controlar su obra era formando parte de la entidad. Cuando llegó, junto a gente como Patxi Andión y Fernando Arbex, lo primero que descubrió fue un fraude conocido como 'la rueda' que, a pesar del nombre, no tenía nada que ver con la que hemos conocido recientemente. En este caso, un grupo de músicos rellenaba las hojas de autores con las composiciones de los amigos y estos hacían lo mismo con los demás. Posiblemente no fuera algo ilegal, porque no había una ley que regulase todo eso, pero no era honrado. Entre otras cosas, este sistema provocaba que gente como Camilo Sesto o Serrat, que vendían miles de discos, casi no cobraban derechos de autor por sus canciones porque se los llevaba gente cuya música apenas se escuchaba", explica Lapuente, que destaca la modernización de la entidad emprendida por por Bautista durante su gestión.