Así recordaba Eugenia Martínez de Irujo su boda con Fran Rivera
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2Ffe6%2F47a%2Fe75%2Ffe647ae7519b39189da2efd5ca93aac9.jpg)
Con la participación del hijo mayor de Carmen Ordóñez en el programa '¡De viernes!', hemos querido rescatar una publicación reciente de su primera mujer, la duquesa de Montoro. Haciendo ver que la relación actual es -o lo era hasta ese momento- bastante buena, quiso compartir una imagen de lo más especial para ella a raíz de una publicación de Carlos Sánchez de Medina Alcina, profesor de moda de la Universidad de Granada. En ella, Eugenia Martínez de Irujo recordaba su boda con Fran Rivera. En concreto, uno de los grandes protagonistas de ese 23 de octubre de 1998 en Sevilla: su vestido de novia.
Para darse el ‘sí, quiero’ con el padre de su hija Tana, Eugenia eligió un vestido de satén firmado por el diseñador Emanuel Ungaro, de escote cuadrado y algunos detalles de encaje. Un vestido que este historiador de arte, especialista en indumentaria y moda, trajo de vuelta con fotografías que emocionaron a la hija de la fallecida duquesa de Alba.
“Tu página también es una verdadera maravilla. ¡¡¡Da gusto ver todas tus publicaciones. Graciasss de corazón por este precioso homenaje al gran maestro Emanuel Ungaro. ¡¡¡Para mí ha sido un placer. ”, comentaba Eugenia Martínez de Irujo a este post en Instagram, que también quiso compartir en sus stories describiendo esta publicación como "tan bonita y emotiva para mí".
Un post que Carlos Sánchez de Medina titulaba “Emanuel Ungaro vistiendo de novia a Eugenia Martínez de Irujo” y donde, junto a numerosas fotografías del día de su enlace matrimonial, explicaba: “En 1998 se casó la hija de la duquesa de Alba vestida con un diseño de Emanuel Ungaro. Fue la propia novia quien propuso la inspiración medieval al diseñador”.
Los otros protagonistas
A pesar de que Eugenia Martínez de Irujo y Fran Rivera tendrían que haber sido los únicos en los que se centraran todos los ojos aquel día, lo cierto es que de entre esos más de mil invitados hubo quienes quisieron arrebatar todo el protagonismo a los flamantes novios.

Belén Esteban y Jesulín de Ubrique en la boda de Fran Rivera y Eugenia Martínez de Irujo
Quizás la pareja que más revuelo causó fue la de la Infanta Elena y Jaime de Marichalar, quienes acudieron a la boda en representación de los Reyes Juan Carlos y Sofía. El matrimonio tuvo un sitio privilegiado cerca del altar desde el que observar la ceremonia y ante el que, tal y como marca el protocolo, los novios hicieron la obligada reverencia ante los Duques de Lugo.
Sin embargo, no fueron los únicos. La pareja formada por Rocío Jurado y José Ortega Cano también dieron la nota, aunque de una manera bien distinta. Y es que llegaron a la ceremonia al mismo tiempo que lo hacían la Infanta Elena y Jaime de Marichalar y, por ese motivo, se vieron obligados a entrar a la Catedral por la puerta de atrás, privándoles de su minuto de gloria ante los andaluces que se encontraban a las puertas del templo.

Mar Flores en la boda de Eugenia Martínez de Irujo y Fran Rivera
Destacada fue también la presencia de Mar Flores en la ceremonia, pues de esta forma se convertía en la primera aparición de la modelo como pareja de Cayetano Martínez de Irujo. A pesar de que según apuntaron los medios de comunicación de la época, la Duquesa de Montoro y la madre de esta no aprobaban del todo esa relación, parece que su hermano pudo convencerla y allí que acudió Flores. Con un espectacular traje consiguió dejar a todos boquiabiertos convirtiéndose en la otra protagonista de la que se prometió como la gran boda del año. El 16 de octubre de 1999 nació su única hija, Cayetana. Lamentablemente, el matrimonio no duró y en 2002 anunciaron su divorcio.
La emoción de Carmina Ordoñez
La ceremonia transcurrió sin novedad alguna y cumplió con el estricto protocolo y la fastuosidad que caracterizan a este tipo eventos. Ahora bien, si hubo un detalle que ni a Eugenia Martínez de Irujo ni al resto de los allí presentes se les pasó por alto fue la llorera de Carmina Ordoñez a lo largo de todo el oficio impartido por José Carrillo, amigo personal del diestro.

Eugenia Martínez de Irujo y Fran Rivera posan a la salida de su boda con Carmina Ordóñez, Cayetano Martínez de Irujo y la Duquesa de Alba
En aquel momento no se le dio demasiada importancia porque se entendía la emoción de una madre al ver a su hijo pasar por el altar y más por semejante altar, pero lo cierto es que parece que ni a la novia ni a la crítica les sentó nada bien tal actitud. Y es que, según recogió la revista Semana, la hija pequeña de la Duquesa de Alba pensó que su suegra debía haber tratado de controlar un poco más sus emociones y no reclamar tanto protagonismo en un día en el que consideraba que no le tocaba.
Estas lágrimas, en cambio, contrastan bastante con las declaraciones que según ofreció el propio Fran Rivera a Risto Mejide en las que aseguraba que su madre no estaba de acuerdo con que contrajera matrimonio aquel día: " Mi madre me dijo: Fran, tengo que hablar contigo. No te cases mañana, Eugenia no es la mujer de tu vida y esto no va a durar".

Carmina Ordóñez agarra cariñosamente a su hijo Fran Rivera
Su batalla por Tana
Un vaticinio que hizo que, cuando Fran Rivera y Eugenia Martínez de Irujo anunciaran su separación en 2002, la reacción de Carmina Ordóñez fuera decirle a su hijo: "Mucho habéis durado". Atrás dejaban 4 años de matrimonio y una hija en común, Cayetana Rivera Martínez de Irujo Ordóñez Fitz-James Stuart, la discreta Tana Rivera.
Más allá de posibles infidelidades del torero, la realidad es que la relación entre la expareja desde su separación parecía cordial, llegando a coincidir en eventos públicos como El Rocío de 2010. Todo cambiaría en 2012, 20 años después de conocerse: Fran Rivera interpuso una demanda en el Juzgado de Familia de Madrid para solicitar la custodia de su hija, pidiendo que Tana Rivera pasara a vivir con él y Lourdes Montes en Sevilla.
Comenzó una etapa de tensos cruces de acusaciones entre ambos, ya que Eugenia Martínez de Irujo (sin negarse a las visitas compartidas) no quería que su hija cambiara en plena adolescencia de colegio. La duquesa de Montoro centró su defensa en la inestabilidad sentimental de su expareja, que entonces llevaba un año saliendo con Lourdes Montes, a la que también acusó de ser la inductora de esta idea. Además de asegurar que para ella Fran Rivera era como si estuviera muerto, como recogió entonces 'ABC'.
Sería en el invierno de 2013 cuando todo se resolvería por vía judicial, decidiéndose que la guardia y custodia de Tana seguía en manos de Eugenia Martínez de Irujo, pero que aumentaba el régimen de visitas de su padre, Fran Rivera. Unos momentos muy difíciles tras los que las aguas parecían haber vuelto a su cauce, manteniendo una relación cordial por su hija y dejándose ver en actos públicos juntos, como el funeral de María Jiménez en Sevilla.
Fran Rivera se casó con Lourdes Montes, con quien tiene dos hijos, en 2013 en una ceremonia civil, aunque tras la anulación de su boda con Eugenia Martínez de Irujo llegaría la eclesiástica. Mientras que Eugenia Martínez de Irujo contrajo matrimonio en una divertida ceremonia en Las Vegas con Narcís Rebollo en 2017.
Francisco Rivera asegura que su exmujer, Eugenia Martínez de Irujo, le "despellejó"
Después de mucho tiempo alejado de los focos, el torero Fran Rivera, que se cortó la coleta en el año 2017, ha roto su silencio y ha lanzado varios dardos inesperados contra su exmujer, Eugenia Martínez de Irujo, con la que se casó en 1998 en la catedral de Sevilla y se separó en 2002. A pesar de que tienen una relación buena y cordial desde hace años, el torero ha desvelado que la hija de la desaparecida duquesa de Alba se portó muy mal con él cuando pusieron punto y final a su matrimonio. "La separación fue terrible", ha asegurado en el programa '¡De viernes!', presentado por Santi Acosta (55) y Beatriz Archidona (39).
Francisco Rivera y Eugenia protagonizaron una lucha en los tribunales por la custodia de su hija Tana, que fue otorgada a su madre. Aunque en 2021, el torero solicitó un cambio en la custodia, la Audiencia Provincial de Madrid confirmó que la niña seguiría viviendo con su madre. En el año 2020, señaló que no estaba de acuerdo con la resolución judicial. "Yo no quiero visitar a mi hija. A mi hija la quiero criar. Yo quiero estar con mi hija. Ahí se acaba el buen rollo", explicó en el programa de Risto Meijde anteriormente.
Ahora, Fran Rivera sigue pensando que sufrió una gran injusticia. "La sentencia de mi primer matrimonio con Eugenia fue un horror. Me maltrataron absolutamente. Fue un abuso, una barbaridad", ha manifestado.
Años después de este momento tan duro que vivió, y tras enterrar el hacha de guerra con su exmujer, Fran Rivera ha señalado: "Yo no le tengo ningún rencor a Eugenia de todo lo que pasó, ninguno, pero como se portó después no, no estuvo bien". "Me despellejó como padre", ha sentenciado en '¡De Viernes!'.
