¡La Boda Perfecta - Galder y su Novia Coreana en un Día Especial!

Guionista en La Resistencia

-¿Y cómo decidiste centrarte en la improvisación?

-La verdad es que empecé a hablar con el público desde el principio. Pero como no podía subir en las redes sociales los vídeos de los monólogos para no quemarlos, comencé hace cuatro años a compartir las improvisaciones con el público. Y gracias a eso comencé a ganar en popularidad. Ahora hago la mitad del espectáculo con mi texto y la interacción con la gente, aunque cada espectáculo es distinto. Depende de cómo esté el público.

-¿Y cómo haces para encontrar a un público que te dé tanto juego?

-Tengo suerte de que viene gente a favor de obra, que está dispuesta a hablar sin ser pesada ni con intención de interrumpir. Me dan mucho material y muchas posibilidades de interactuar. También ayuda que yo no suelo sacar sus caras en los vídeos. Hay un poco más de anonimato que en otros espectáculos y eso les da pie a contar cosas muy íntimas.

Anécdotas inconfesables

-¿Qué es lo más fuerte que te han llegado a confesar delante de todo el mundo?

-Tengo muchas anécdotas, pero recuerdo cómo un chico nos contó que su madre, que era ciega, entró en su habitación mientras estaba teniendo relaciones sexuales con su chica y cómo se quedaron parados, como si se tratara de un velociraptor. Eso sí, antes de irse les echó una sonrisa. La escena era muy divertida.

-Visto lo visto, deberías pagar a tu público por sus aportaciones

-Sí, ja, ja, ja. Debería compartir con ellos el precio de la entrada o hacer una sociedad cooperativa como el Eroski para repartir beneficios.

-¿Qué piensas de los que dicen que te estás riendo de la gente?

-Yo creo que el público entiende que todo está al servicio del humor y que no se está emitiendo un juicio sobre nadie. Yo trato de ver cómo le está sentando todo a la persona que está contando las cosas y si ves que se lo está pasando bien, continuas, fuerzas más los límites y le das más caña. Si ves que no, paso a otra cosa. Yo empiezo mi show de hora y media diciendo directamente que soy imbécil, que no pasa nada. De mí se puede reír el que quiera. Lo hago para que entiendan que esto es un juego.

Podcast de ciencia

-Además de monologuista, también presentas 'Hiper Movidas', un podcast de ciencia. ¿La teoría de cuerdas tiene gracia?

-La dificultad de entender algo complejo ya es suficientemente motivo para que sea gracioso y divertido. Es lo que intentamos demostrar en nuestro podcast, que acaba de terminar la primera temporada en la plataforma Podimo. Lo presentamos José Luis Crespo, QuantumFracture en redes sociales, y yo. Él trae a un científico y yo a otro cómico. Intentamos encontrar un término medio entre lo que ellos, que controlan mucho de un tema, quieren explicar y lo que nosotros podemos comprender. Y ahí está la comedia. La ciencia con humor entra.

-¿Te ves dentro de diez años presentado un programa de entrevistas como el de David Broncano?

-Mi sueño y objetivo número uno es estar vivo el mayor tiempo posible. Y con verme con salud y feliz, ya firmo. Eso sí, me encantaría hacer un programa y probar más cosas nuevas relacionadas con la comedia y la ficción. Pero no me lo planteo como meta. Prefiero centrarme en disfrutar en lo que estoy haciendo ahora.

-Por cierto, ¿qué opinas de la polémica del fichaje de Broncano por RTVE?

-No lo he seguido mucho, pero me alegro por mis excompañeros. El tiempo dirá si tienen éxito y si ha sido una buena decisión por parte de TVE. Sé que el fichaje se ha ideologizado, pero no olvidemos de que se trata de un programa de humor y de entretenimiento, no de política.

Si continuas utilizando este sitio aceptas el uso de cookies. más información

Los ajustes de cookies de esta web están configurados para "permitir cookies" y así ofrecerte la mejor experiencia de navegación posible. Si sigues utilizando esta web sin cambiar tus ajustes de cookies o haces clic en "Aceptar" estarás dando tu consentimiento a esto.

Cerrar