KIMONOS PARA BODAS: LAS INVITADAS.
Sabemos que siempre ha habido dos colores prohibidos para las invitadas a una boda: el blanco y el negro. Pero las normas están para romperlas, y aunque yo no me iría tan lejos como para presentarme un con vestido largo de raso blanco “opacadora total” en un evento de este tipo, si que podemos introducir el negro en parte de nuestro outfit como invitadas.
Jugando con los estampados orientales y un obi en nuestro vestido o mono:
Y si los vestidos no son lo suyo, tranquila, un traje de pantalón puede ser el outfit ideal para introducir un toque japonés, ya se utilizando un obi como fajín y un kimono suelto y abierto como prenda fina de abrigo en una boda de mañana:
Lo midi está de moda
El largo midi está de moda en los vestidos de fiesta 2019, así que si quieres acertar, no dudes en elegir uno de estos modelos para tu próximo evento. El color verde turquesa es un tono ideal para bodas de tarde, ya que no es ni demasiado oscuro ni demasiado vivo y, combinado con otras tonalidades más claras, como rosados, hará de tu estilismo pura elegancia. Además, lo puedes complementar con algún elegante tocado o diadema y, si el vestido lo permite, con un cinturón de una tonalidad similar. Para los complementos puedes jugar con colores metalizados, como el dorado.
Todo al rojo
Los vestidos rojos de fiesta son una apuesta segura llena de fuerza. Combina el tuyo con complementos de colores neutros, como el plata, el dorado o el negro para suavizar el impacto visual de esta tonalidad. La sobriedad en las joyas es siempre un acierto: utiliza complementos sutiles, como una pequeña gargantilla o colgante y unos finos pendientes. Por otro lado, no recargues el peinado; un bonito recogido bastará, aunque si quieres adornarlo utiliza pequeños clips, que aporten toques de brillo a tu pelo, o un sencillo tocado. Para resguardarte del frío no hay nada más elegante que cubrirse con una chaqueta o bolero de pelo, que puede ser sintético e igual de glamuroso si eres una chica eco.