Las rutinas de belleza de una it girl
Resulta sorprendente descubrir ciertas similitudes de la emperatriz con otro ídolo popular, Diana de Gales. Las dos gozaron de veneración popular, fueron muy criticadas por los círculos aristocráticos y vivieron atrapadas en matrimonios infelices. Ambas padecieron depresiones severas, trastornos de la alimentación (bulimia y anorexia) y estaban obsesionadas con su físico, aún así fueron auténticos ídolos de masas y preceptoras de tendencias.
En su tocador nunca faltaba la Crème à la Fraise de Guerlain. Su formulación garantizaba la protección y la suavidad que su delicado cutis necesitaba. Además el ungüento tenía propiedades blanqueadoras perfectas para mantener sin manchas su piel de porcelana. Sisi fue en su época un filón publicitario para la célebre maison.
Mención aparte merece su larguísima y frondosa cabellera; sin duda, su seña de identidad a la que dedicaba mucho, mucho tiempo. Para que os hagáis una idea, en su rutina capilar diaria invertía alrededor de 3 horas y algunas más cada vez que se lavaba el pelo, que normalmente era 1 vez cada tres semanas. Fanny Feifalik fue su peluquera personal y la creadora de los elaborados recogidos que lucía en público.
Así es la verdadera historia de Sisi, y no es de cuento
La imagen que el cine construyó en torno a Sisi, la última gran emperatriz de Europa no tiene nada de real. Infeliz, depresiva, vigoréxica, con trastornos de la alimentación… Pese a su legendaria belleza, su vida fue una sucesión de trágicos episodios, incluido el de su muerte a manos de un anarquista un 10 de septiembre de hace 125 años. En el Museo Sisi de Viena puedes conocer más sobre su vida y observar sus vestidos y objetos personales .
En las navidades de 1955 se estrenó en Viena “Sissi”, la célebre película dirigida por Ernst Marischka, protagonizada por Romy Schneider y Karlheinz Böhm. La première coincidió con el 118 aniversario del nacimiento de Isabel de Baviera en la Nochebuena de 1837 en el Herzog Max Palais de Múnich. Paradójicamente, las biografías de la actriz austriaca y de Sisi comparten similitudes sorprendentes. Ambas representaban un ideal de belleza y felicidad plena que en realidad no era más que una deslumbrante fachada que ocultaba una desgraciada existencia. Las tres entregas de la taquillera saga cinematográfica popularizaron –además de la incorrecta doble «s» en su nombre– un personaje mitificado, con una vida de ensueño, donde los avatares de la historia adornaban un argumento edulcorado, interpretado por personajes que parecían salidos de la factoría Disney. Pero su biografía no fue precisamente un camino de rosas.
Paco Rabanne
Famosamente conocido como Paco Rabanne, Franciso Rabaneda Cuervo es un diseñador de alta costura español que nació el 18 de febrero de 1934 para iluminar el mundo de la moda. Su carrera en la moda comenzó cuando perfeccionó sus habilidades en joyería en Balenciaga, Dior y Givenchy.
La madre de Rabanne era jefa de sastrería en Balenciaga en España. Cuando comenzó la Guerra Civil Española, él y su madre partieron hacia Francia. Allí estudió arquitectura en la Ecole des Beaux Arts y se graduó allí en 1964. En 1965, Paco inició su carrera como diseñador, exhibiendo una línea de doce conjuntos contemporáneos, titulada The Unwearables. Fue entonces cuando presentó su primer vestido hecho de plástico.
En 1966 estableció su propio negocio y utilizó materiales como el plástico, el papel y el metal para sus peculiares y llamativos diseños. Aunque su formación inicial comprendió la arquitectura, se hizo popular como ‘ l’enfant terrible ‘ durante la década de 1960 en el mundo de las tendencias y la moda. Muchos de sus diseños tienen un toque arquitectónico y esto es lo que hace que sus diseños destaquen como lo hacen.
Rabanne es conocido por diseñar el vestuario de películas como Barbarella. Mylène Farmer utilizó sus diseños en sus conciertos musicales. Françoise Hardy también era una gran admiradora de las obras de Rabanne. Además de esto, sus diseños fueron lucidos por Brigette Bardot, Audrey Hepburn, Elizabeth Taylor y muchas más personalidades que se sienten atraídas por algo atípico.
¿Cuál fue el precio del vestido de boda de Lady Di?
En el año 2019, se llevó a cabo una valoración del vestido de boda de Lady Di, el cual alcanzó un precio de 167.800 euros. Si convertimos este valor a libras, equivaldría a unas 149.000. El alto valor de esta pieza se debe a las 10.000 lentejuelas de nácar que fueron bordadas en el corpiño, las mangas abullonadas y el velo. Este vestido se ha convertido en un ícono de la moda y en una representación del estilo y elegancia de Lady Di en su día más especial.
Valorado en una suma exorbitante, el vestido de bodas de Lady Di se ha convertido en un símbolo de moda y un reflejo del estilo y la elegancia de la princesa. Con 10.000 lentejuelas de nácar bordadas en el corpiño, mangas abullonadas y un velo impresionante, esta pieza única continúa inspirando a las novias actuales y capturando la imaginación de aquellos que admiran el legado de Lady Di.