Opciones para darle un nuevo uso a tu vestido de novia
Si ya has utilizado tu vestido de novia y no sabes qué hacer con él, no te preocupes, existen varias opciones para darle un nuevo uso y aprovechar al máximo esa prenda tan especial. Una de las opciones es transformarlo en un vestido de fiesta. Puedes hacerle modificaciones como cortar la falda, agregar encajes o pedrería, cambiar el escote, entre otros detalles. De esta manera, podrás lucir tu vestido en diferentes ocasiones especiales y seguir disfrutando de su belleza.
Te puede interesar: Fashion New York: Vestidos de Fiesta de Última ModaOtra opción es donar tu vestido de novia. Hay muchas organizaciones benéficas que aceptan vestidos de novia para ayudar a mujeres que no pueden permitirse comprar uno nuevo. Además, también puedes considerar prestar tu vestido a alguna amiga o familiar que esté por casarse y quiera ahorrar en gastos. De esta manera, tu vestido seguirá siendo utilizado y podrás compartir la alegría de tu día especial con alguien más.
3. Los tejidos naturales
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4. Optar por ser tradicional
Cuando hablamos del cuidado de prendas tan importantes y especiales como un vestido de novia, siempre recomendamos conservar las clásicas maneras de guardarlo y evitar experimentos que muchas veces no salen como esperamos.
Guardar el vestido en el porta-trajes es una excelente opción para aquellos vestidos entallados, sin cola, y más sencillos, por así decirlo. Los vestidos de cola larga o de falda voluminosa, muchas veces terminan saliéndose del porta-trajes, lo que ocasiona mayor incomodidad en el armario.
Finalmente, otra opción más personalizada es utilizar una bolsa comprimida. Se trata de un procedimiento donde se elimina el aire de la bolsa con la finalidad de reducir su tamaño, pero manteniendo su forma y estado y permitiendo ser guardado en cualquier lugar.
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Cajas para guardar vestidos de novia: la mejor protección para tu preciado vestido
Las cajas para guardar vestidos de novia se han convertido en una opción cada vez más popular entre las novias que desean preservar y proteger su vestido de bodas. Estas cajas ofrecen una solución segura y práctica para almacenar el vestido de manera que se mantenga en perfectas condiciones a lo largo del tiempo.
El vestido de novia es una de las prendas más especiales y significativas en la vida de una mujer, por lo que es comprensible que se desee conservarlo en óptimas condiciones. Las cajas para guardar vestidos de novia están diseñadas específicamente para este propósito, ofreciendo un espacio adecuado y seguro para almacenar el vestido de manera que se evite su deterioro por factores externos como la luz, el polvo o la humedad.
4. Cómo guardar el vestido
Envuelve el vestido de novia en paños de algodón, muy finitos, para que el tejido transpire. También se puede envolver con un papel de seda incoloro y libre de ácidos, sin meter a presión. No lo guardes en una funda de plástico porque este tipo de materiales no permiten que el vestido transpire y eso puede derivar en moho y manchas de humedad.
La mejor opción para guardar el vestido son cajas de cartón, preferiblemente artesanales, de buena calidad y confeccionadas a medida, para que el vestido tenga todo el espacio que necesita. Estas cajas deben estar correctamente cerradas para evitar que entre luz y amarillee el vestido.
Jamás se debe guardar un vestido de estas características en vertical, siempre en horizontal, y no se debe guardar bajo ningún concepto en lugares húmedos. Busca siempre espacios sin luz, sin humedad y que no tengan exceso de calor. Y es que el calor, el frío y la humedad contribuyen a estropear prendas tan delicadas como un vestido de novia. Lo mejor para que el vestido no sufra y se mantenga intacto es guardarlo en un lugar fresco y oscuro.
Si quieres que el vestido no solo aguante las inclemencias temporales, sino que quede protegido de visitantes no bienvenidos, como polillas e insectos similares, te aconsejamos colocar junto a él una bolita de naftalina o alcanfor. Finalmente, como guinda para asegurar la máxima protección posible del vestido, recomendamos airearlo una vez al año. Además de disfrutar de él y revisar posibles desajustes que deterioren su perfecto estado, podrás evitar las dobleces que con el tiempo pueden surgir.